Viajando por España es fácil ver nuestras carreteras cada vez más llenas de clubs de alterne. Vergüenza para nuestro país, donde mujeres, la mayoría pobres inmigrantes, son vejadas en su dignidad y sometidas al yugo de la esclavitud sexual. No he oído denuncia alguna ni luchar por la erradicación de esta flagrante violación a ninguna de nuestras ministras que se dicen progresistas y que sonríen y se besan al aprobar una ley que asesina a niños, y que ataca a la mujer, a la familia y a toda la sociedad en sus más profundos cimientos. [+ información]
Comienza mintiendo cuando dice que no se lucha contra la prostitución cuando cada vez son más habituales las noticias de desmantelamiento de mafias que trafican con mujeres y continúa con las mentiras que los medios de la derecha airean sobre los ingresos legales de los políticos del PSOE (mientras tapan los legales y los ilegales de la derecha)
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