La boda empezó con sonrisas, con los vítores propios de una celebración y con brindis por la felicidad de la pareja. Pero el final fue abrupto. Terminó como el rosario de la aurora, en algo parecido a una batalla campal. Las afinidades políticas de algunos de los participantes parecen estar en el origen de la trifulca que se saldó con cinco personas heridas, entre ellas dos agentes de la Ertzaintza que habían tratado de poner calma entre los contendientes, dos de los cuales terminaron detenidos y dos más imputados. [+ información]
La causa del problema ( era una boda entre una Vasca de Guipuzcoa y un Castellano de Valladolid ) fue que familiares de la novia quisieron poner un disco de un cantante Aberzale y el novio dijo, con dos cojones, que NO, lo cual generó la pelea.
ResponderEliminarNota: Dicen que los ánimos ya estaban calientes entre los vascos ( vaya anfitriones de los cojones ) y los visitantes castellanos, por motivos políticos.
Ya lo he advertido en otro comentario... así comenzó la guerra in-civil en España, donde se mataban hermanos entre hermanos primos con primes y cuñado con cuñados... este caso es una prueba más... ya estamos comenzando.