Una vez conocidas las positivas previsiones meteorológicas y visto que se nos acercaba un empeoramiento, Laura y yo no nos lo pensamos más y ayer abordamos una nueva etapa del Camino Lebaniego, tratando de aprovechar el único día de bonanza antes de que llegue el empeoramiento. En esta ocasión, aunque la etapa fue más larga, 36,7 Km., en la que invertimos 6h:43’, nos resultó bastante más amena que la anterior. Puede influir que haya sido más distendida, el que parte del camino haya discurrido por bosques, y otra parte por la costa, haciendo más agradable y variado el itinerario.
Saliendo de Barreda, cruzamos lugares que son un referente turístico y cultural, como Santillana y Cóbreces, terminando en Comillas. En el transcurso de este tiempo, vimos desde casas señoriales, casonas, palacetes y palacios, además de ermitas e iglesias diseminadas por todo el camino, así como instalaciones ganaderas (pocas) perfectamente conservadas. En contrapartida también vimos algunas casonas y casas muy deterioradas, así como instalaciones ganaderas abandonadas.
Nos encontramos con ovejas, cabras, vacas, caballos y burros, pero lo que más nos sorprendió fue un grupo de alpacas (de la familia de las llamas), cerca de Oreña.
Vimos perros de todas las razas, tamaños, colores y ladridos posibles, pero no nos vimos seriamente amenazados por ellos en ningún momento.
Ya comenzamos a diseñar el siguiente capítulo que esperemos sea lo antes posible, pero que de momento no sabemos cuándo lo podremos llevar a efecto, porque depende de las condiciones meteorológicas.
Os trasladamos estas imágenes que complementan un poco lo aquí contado.
Bravo por nuestra adorada pareja, que además del Jubileo, se tienen ganado el Cielo, por ser estupendas personas y un muy ejemplar matrimonio como Dios Manda.
ResponderEliminarGracias y un abrazo !
Me uno al comentario anterior
ResponderEliminarUn besete para Laura