En Santander, durante el confinamiento de 2020, se produjo este hecho: un coche de la policía entró en la alameda de Oviedo, zona de Numancia, y estuvo unos minutos haciendo maniobras hacia un lado y hacia otro, con la sirena sonando en ocasiones, mientras un agente voceaba algo por el altavoz, en medio del ambiente desolado. No pude entender qué decía, pero hablaba en un tono informal, quizá era algo del tipo "ánimo, muchachos, que esto lo superamos". Me pareció ridículo, inoportuno y de poca profesionalidad. Eso se produjo al menos dos días. Ignoro si en el coche iba una sola persona o dos. Como no he oído que nadie haya comentado nada, he creído necesario hacerlo constar aquí.
Adolfo Palacios para Cartas al Director de El Diario Montañés.
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