SOLEDAD DE LOS MAYORES

Durante milenios hemos vivido en la tribu selvática, y se supone que aquel poso influye hoy en nuestras expectativas. Según esto, la soledad de algunos ancianos no se va a combatir exitosamente con programas municipales e institucionales, mientras no haya presencia de niños y jóvenes en cierta proporción. Se ha hecho la experiencia de llevar críos a residencias de ancianos, y los resultados han sido buenos, supongo que también para los propios niños, que en la escuela coexisten prácticamente sólo con otros niños, lo cual es artificioso. A los abuelos, por otro lado, no les vendrá mal tener ciertas obligaciones con sus nietos, aunque si ello les recorta horas de sueño puede ser fatal para su salud. Como remedio a la soledad, la presencia infantil está difícil hoy día, por la baja natalidad. Y es que, se habla de la España vacía, como si sólo lo rural (y sólo España) estuviera vaciándose, pero en realidad el vaciamiento es también de las ciudades, y de buena parte del mundo.

Adolfo Palacios en Cartas al Director de El Diario Montañés.