Aparece en el Diario Montañés de hoy una carta firmada por Fernando Llorente de la Peña (ver carta pulsando aquí) y entiendo el desencanto del autor. Este esgrime argumentos de peso para no votar que todos conocemos, ya que son los mismos o parecidos a los que afloran en nuestro fuero interno. Además, trasciende algo tan entendible y lamentable como es el desánimo y la falta de esperanza, motivados por la manifiesta incapacidad, incompetencia y falta de sensibilidad de nuestros dirigentes hacia los verdaderos problemas de los votantes.
Toda esa desazón y desencanto tiene su razón de ser si entramos a valorar los motivos que expone el autor y llegamos a la conclusión, que aún teniendo poderosas razones en su relato, NUNCA debemos dejar de votar.
Me permito recordarle que existen países en los que los ciudadanos no tienen la posibilidad de manifestar la opinión a través del voto. La consecución de este derecho supone mucho esfuerzo y sacrificio, hasta el extremo de que la defensa de este y otros derechos ha costado en algunos casos la cárcel y en otros la muerte de quienes lucharon por conseguirlo.
Entiendo y comparto su desilusión hacia unos dirigentes que nos defraudan cada día, pero estoy convencido que podemos solucionar los problemas existentes mediante otras acciones, que no sean la omisión a nuestro derecho al voto.
Lo correcto es votar y posteriormente exigir, con todo el rigor posible, a nuestros representantes el que sepan estar a la altura de las obligaciones adquiridas.
Jose contigo al 100%...es muy facil decir no voteis y pasar de todo....aunque igual lo que quiere lograr con esto darles un toque de atencion sobre su gestion...teniendo en cuenta que siempre votara una mayoria esto quizas sea hasta bueno,pues el sistema continuaria y a la vez se crearia nerviosismo entre ellos por la cantidad de los que no han querido votar.
ResponderEliminarsi se quiere conseguir esto me uno al NO VOTO...pero creo como tu en este sistema mientras no me vendad otro mejor.
Un salu2
Yo creo que es mejor votar y hacerlo en contra del que lo hace mal que no votar. Si no se vota aceptas el resultado de los demás y el hecho de que no voten muchos electores en un "problema" de un día, después los representantes elegidos con esos votos recibidos harán lo mismo que antes. Y si no te gustan los que gobiernan y no te ofrecen confianza los de la oposición, siempre se puede hacer voto de castigo dando el apoyo a los partidos pequeños que actúan antisistema, o contrarios a las opciones mayoritarias, como ha pasado con Ciudadans de Cataluña. El no votar es apoyar el pasotismo político y dar alas a los manipuladores. Sigo pensando que mejor un contundente voto en contra que eso si duele y mucho.
ResponderEliminarPero al no haber abstencion,ellos y me refiero a todos los politicos,se dan por buenos gobernantes....pero si viesen una gran abstencion quizas intentasen cambiar en su forma de trabajar...
ResponderEliminarUn salu2
Hay que ser pragmático, ¿quien se acuerda ahora de la abstención de las elecciones europeas y de la abstención en las catalanas? Todo el mundo sabe quien es el presidente en Cataluña ahora y nada más, lo de la abstención no se acuerda hoy, nadie o casi nadie. Las lamentaciones del poco voto son flor de un día y sin embargo lo de los ciudadans lo tendrán presente los 4 añitos.
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