La cruz de Lampedusa mide más de dos metros de altura y fue construida con tablas de una barcaza de inmigrantes que naufragó, dejando 349 muertos en el Mediterráneo.
Fue creada para que tanto a laicos como religiosos meditaran sobre el drama que sufren estas personas que pierden o ponen en riesgo su vida en busca de un futuro mejor.
En 2014 recibió la bendición del pontífice en Roma, el papa Francisco y, desde entonces se ha convertido en un símbolo universal de dignidad y solidaridad con la situación de emergencia humanitaria que sufren miles de inmigrantes y refugiados.
La peregrinación de la Cruz de Lampedusa va más allá del sentido estrictamente religioso y debe servirnos para reflexionar y para lanzar un mensaje de concienciación social.
Después de haber recorrido todas las diócesis de Italia, el Museo Británico y algunas diócesis españolas nos llega a Cantabria, en el momento en que se está celebrando el Año Jubilar del ‘Lignum crucis’ que se custodia en el Monasterio de Santo Toribio de Liébana.
En los Corrales estará el miércoles 21 de junio, tal como podrás ver en el gráfico del itinerario que se expone a continuación:
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