Tras los últimos robos perpetrados en viviendas y comercios de Los Corrales de Buelna, la solicitud de colaboración ciudadana por parte de nuestras autoridades parece insuficiente y nos lleva a preguntarnos ¿es que no la han tenido siempre?
Por ejemplo, la Asociación de Comerciantes ha elaborado un protocolo para cuando alguno de sus asociados detecta algún sospechoso, comunicárselo a la policía, al resto de comerciantes y a la ciudadanía en general, para evitar que se produzca alguna desagradable incidencia. ¿No es esto colaboración ciudadana?
El desconcierto de la ciudadanía por la inseguridad llega hasta límites de pretender poner cámaras de vigilancia en distintos puntos del pueblo, además de las ya instaladas en los comercios, convirtiéndolo en una especie de Súper Gran Hermano Corraliego.
Otros son partidarios de confiar la seguridad a empresas privadas y los más radicales barajan la grotesca posibilidad de recurrir a patrullas ciudadanas.
Hay quienes con más sentido común exigen a las autoridades políticas y policiales una inmediata solución del problema abogando por la reunión conjunta de ambas fuerzas, para tratar de analizar los motivos ‘reales’ por los que cualquier delincuente que se precie, por muy inexperto que sea, escoja Los Corrales de Buelna como escenario de sus fechorías delictivas, contando de antemano con la convicción de que tendrá un elevado porcentaje de posibilidades conseguir el éxito apetecido.
A. José Salas en Cartas al Director, de El Diario Montañés.
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