Adolfo Palacios ha querido enriquecer la aportación de José López Mora sobre la "casa de las monjas", recientemente publicado, dentro del apartado dedicado a OTROS CINES QUE FUNCIONARON EN EL PUEBLO Y EN COO:
Nuevamente me admiro de la activa vida cultural que tuvieron, al menos no pocos, de los vecinos de nuestro pueblo, y supongo que muchos otros asistiendo como público. No sé si será equiparable a lo actual. Yo conocí algunos rescoldos de ello (nací en 1960) y, aun algunas cosas que tuvieron lugar durante mi infancia, permanecí ajeno a ellas o ni siquiera las conocí. Llevo años teniendo claro que me gustaría haber conocido el pueblo durante los años 50.
Algunas personas dicen que la manera de ser de los corraliegos no es muy de desear. No tengo opinión al respecto, porque yo hace muchos años que salí del pueblo y porque cuando era crío no me enteraba de gran cosa; es posible, por otro lado, que el ambiente haya cambiado mucho en estas seis décadas, y también que algunos tipos de gente se hayan ido, y que otros tipos de gente se hayan incorporado. En todo caso, sí parece que, si el Corrales actual hace honor a su pasado, ha de ser un pueblo dinámico y comprometido. Sorpresa me ha causado, como dice también nuestro investigador, que Miguel Cabrero (y Senach) se hubieran dedicado, en su juventud, a menesteres tan artísticos; se ve que evolucionaron en su compromiso.
La "casa de las monjas", con esta crónica me entero de que es de 1946 -yo creí que era anterior-. El teatro anejo se ve que tuvo, entonces, una trayectoria de actividad de veinte años, pues yo lo conocí ya destartalado en los 70; decía la canción que "veinte años no es nada", así pienso: un teatro como ése -que tenía un piano y una concha de apuntador, recuerdo- merecía un rendimiento de más largo recorrido. Pero "sic transit gloria mundi", y "Dios me lo dio, Dios me lo quitó". En la casa de las monjas, no se me aparta de la cabeza que hubo allí, en la primera planta según sube la escalerita, una guardería, a la que me llevó mi madre en alguna ocasión (no creo que lo haya soñado). Estuvo tal vez en la misma estancia en que, diez años después, iba yo a practicar música, en un piano marca "Chassaigne Frères". Y en la estancia simétrica, capilla que era, tenían también un bonito armonio, al que se me iban las manos pero que nunca llegué a ver funcionar; me pregunto qué habrá pasado con ellos. Ojalá pueda ver más por dentro alguna vez esa casa, así como los cuartitos de arriba, donde por lo visto estaban las oficinas de Acción Católica... El aspecto que presenta actualmente toda la finca, asfaltada hasta los bordes como está, será más práctico para los cometidos actuales pero a ver si algún día los niños que por ahí bullen puedan tener a la vista, en forma de hologramas, el verde y los ajardinamientos que tan bonito hacían, si es que mantienen el gusto necesario para apreciarlo. Esa zona, en realidad desde "la plaza" hasta la vía del tren, ha sufrido drásticos cambios en las recientes décadas, y todos ellos han resultado en menos hierba y menos arbolado y "arbustado": estatua de San Juan, cruz de los caídos, árboles del terreno de la parroquia... Qué verde era mi valle.
1 comentario:
Muchas gracias por lo de investigador. Nada más lejos de la realidad, simplemente me entretengo recuperando cosas de nuestro pueblo, No hay nada más. Las informaciones las obtengo del Archivo donado por los hijos de Felipe Lucio “Capeli” al Ayuntamiento, de las recopilaciones que guardó mi padre, y sobre todo de lo que me cuentan muchos vecinos sobre cosas de nuestro pueblo.
Por ejemplo, son vecinos los que me indicaron que el Cine María Luisa, tenía un piano y una concha de apuntador. Desconozco si el cine de Acción Católica lo tenía.
Ayer revisando los escritos de mi padre descubrí que con cierta frecuencia el Coliseum María Luisa, sufría inundaciones provocadas por el desbordamiento del río Muriago. Era cosa tan frecuente, que se incorporaron unas máquinas de extracción de agua. En el cine Lido sucedía lo mismo. En determinado momento se produjo tal inundación, que tuvieron que venir los bomberos de la fábrica. El cine estuvo varios días sin poder funcionar.
Lo de Miguel Cabrero es para escribir una historia. Es cierto que Miguel está en nuestro recuerdo por su actividad política, independientemente de sus tendencias, pero siempre buscando lo mejor para el pueblo. Pero efectivamente, tuvo una enorme trayectoria en el mundo de la cultura. Son bastantes las referencias que se encuentran en los periódicos de la época, sobre su actividad artística. Actividad que se centra en el mundo del teatro, no solo como actor sino como director del grupo de teatro.
Es curioso, estos día buscando un nuevo tema para entretenerme, me encontré una foto de Miguel ensayando con el grupo de música The Boys.
En fin, es cierto que nuestro pueblo jugó un enorme papel en la cultura de aquella época. No nos olvidemos de Doroteo, de Bienvenido, de la Coral, de la Rondalla, de Pulso y Púa, de Los Duques, de The Boys, de The Young. Y tampoco nos olvidemos Juan José Crespo, de José Luis Solar, de Ángel Silos, del Grupo de Teatro de La Salle…. Muchas personas ligadas a la Cultura en nuestro pueblo.
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