Sin lugar a dudas el último cine que existió en nuestro pueblo, gracias a la inversión privada, fue el cine LIDO. Como decimos en muchas ocasiones, cuando hablamos de los cines que existieron en nuestro pueblo, nos estamos refiriendo a una parte de nuestra “historia”. Con respecto a la “historia” de nuestro pueblo, relacionada con el cine Lido, comenzó a gestarse a en el año de 1960 y se finalizó, como propiedad privada, pero gestionada a través del alquiler por el Ayuntamiento, en el año 1998.
Actualmente el edificio del Cine Lido se conserva tal como ha estado durante muchos años, creo que el interior, el anfiteatro, “el gallinero”, la sala de máquinas y demás zonas, no han sufrido modificaciones estructurales, pero, si ha sufrido el deterioro de los años pasados en el olvido.
Como hemos visto, el cine Lido, jugó un papel importante en la difusión de la cultura dentro de nuestro pueblo. Podríamos hacer más referencias, a actuaciones llevadas a cabo en su sala. Pero creo, que las que hemos indicado, nos da clara idea de lo que supuso. En todo caso, todo tiene un principio y un fin. Y este, para el cine Lido llegó a partir del año de 1998 cuando el Ayuntamiento dejó de alquilar el cine. Ya no reunía las condiciones necesarias para seguir manteniendo sus puertas abiertas. Había que invertir dinero en una reforma, todo había envejecido, ya nada era seguro. Y como había sido habitual con otros cines existentes en el pueblo, en la provincia e incluso a nivel nacional, el cine había sufrido un colapso importante. De hecho muchos cines cerraron sus puertas, y por desgracia para nuestro pueblo se tuvo que esperar tiempo para poder tener un nuevo cine.
Pero siempre quedará en la memoria de muchos y en los documentos escritos de la época, el papel que jugó el cine Lido en la formación de nuestro acervo cultural y en los ratos que pasamos.
José Francisco López Mora
Buen trabajo el realizado por José Francisco López Mora, de quien yo desconocía que fuera nieto del Señor Doroteo, si algún día nos vemos, ya me gustará que me cuente cosas de la vida musical del pueblo, las que él quiera.
ResponderEliminarDel cine Lido, decir que yo tengo olvidado por completo que hubiera un bar a la derecha, y con tanta actividad y tanto olor a salchicha y a mejillones por lo visto. Yo, la verdad, lo que vengo a recordar es el almacén de ataúdes que estaba antes de la casa del confitero... Y de la sala de fiestas de la izquierda, pues lo mismo: mundos desconocidos para mí. Un par de pequeños recuerdos puedo aportar, que no son ni anécdotas, pero que cierto bulto harán:
Recuerdo una gala que se celebró en el cine, en la que estaba prevista la presencia del locutor de radio Federico Llata Carrera como presentador. Éste no acababa de presentarse, y mientras le esperábamos (he asistido después a muchos eventos en los que el comienzo no acababa de arrancar, no sé si esto es normal), uno de los organizadores cogió por fin el micrófono, y dijo algo ingenioso: "Es de suponer que Federico vendrá en llantas de la carrera" -los más mayores sabrán el significado de la expresión "en llantas", que creo que ya no se usa.
Y a mediados de los años 70 hubo un mes que el cine cogió vacaciones, supongo que sería por verano. Y entonces el dueño puso un cartelillo que decía: "Hasta nueva orden sólo habrá cine los domingos". Me llamó la atención el texto (a mí y a Eduardo Salas, que estaba entonces conmigo) por el aire tan "militar" que rezumaba, como si fuera obligatorio ir al cine. Eduardo y yo comentamos que habría sido más apropiado decir "hasta nuevo aviso".