¿Hay que intentar que en esta sociedad se le dé más valor a los niños aún no nacidos? Habrá quien diga que todo está normal en este asunto, pero mi opinión es otra. Y ello con independencia del fomento de la natalidad. La muestra de latidos e imágenes a las embarazadas que pidan abortar, creo que es un intento de eso, intento algo torpe, desesperado. Pienso que la posibilidad de abortar, sin más medidas y sin cambiar el contexto, pone las cosas demasiado fáciles a los chicos que ven a las chicas como objeto sexual, y rehúyen luego su responsabilidad; el sexo viene ligado a otras cosas, una visión ecológica debería respetar esa realidad en la medida de lo posible. Y el poder abortar pone también a la sociedad en un camino cuesta abajo en el aprecio de los indefensos, de la vida en general. Los animalistas deben saber de esto. Habría que fomentar la adopción de niños que iban destinados a ser abortados, por familias que los quieran, y echarle imaginación para otras medidas inspiradas en arrimar todos el hombro para superar situaciones individuales desagradables, y construir contextos sociales más cálidos y luminosos. De lo contrario, todos acabaremos sintiendo que estamos en manos de otros, que si estamos vivos es por la suerte de que, a otros, les pareció bien.
Adolfo Palacios para Cartas al Director de El Diario montañés.
No hay comentarios:
Publicar un comentario