EL CINE

Si nos adentramos en el Libro de Contabilidad de los años, que por suerte todavía se conserva, vemos que en 1926 existen las primeras referencias de la existencia de una máquina de cine en el Casino. Así, en el mes abril, tenemos la primera referencia a la entrega a cuenta de la máquina de cine de 500 pts, y para el montador del cine 50 pts. También en el mes de junio, se anota una factura de 29,75 pts. para hacer frente al pago de tela blanca para el telón del cine. A partir de este momento, son continuas referencias al cine. También son frecuentes los pagos relacionados con el cine, como: talones de películas, cinematógrafo y películas, sellos de las películas. En el apartado de “cinematógrafo y películas” hay tres pagos que alcanzan 1058,05 pts.

Si nos fijamos en el año de 1927, los gastos del cine se centran en otros apartados, como puede ser “recibos y devolución de películas”, con un número de 10 anotaciones, con un importe total de 200,25 pts. También están los distintos distribuidores de películas como Exclusivas Diana, con tres recibos que suponen un total de 187,4 pts; Hispano American Films, con 6 recibos que suponen 304, 95 pts; o Vilaseca y Ledesma con cuatro recibos de un total de 252,85 pts.

A lo largo de los años hay otra referencia a distribuidores de películas, Príncipe Films de San Sebastián, y factura a determinados señores que están relacionados con el cine, como es el caso de José Guilló, Ernesto González, Vicente Guilló.

También hay referencias a las personas que llevaban a cabo la proyección de las películas, como podían ser Francisco Marcano al que se le gratifica con 50 pts, Francisco Orbea que, en 1929, se le hacen cuatro pagos con un total de 75 pts. También en octubre de 1929 y en febrero de 1930 se hicieron dos pagos de 10 pts por la proyección de películas al Sr. Bajón. Igualmente hay pagos que se realizan a Manuel Torcida, por la limpieza de la máquina de cine, que supone 50 pts. y también en 1928, nos encontramos con un pago a Manuel Herrera por la reparación de la máquina de cine. Reparación que no debió de ser de gran dificultad, dado que solo importó 5 pts. Otras referencias con respecto al cine, son las que encontramos en 1929. En concreto, son dos facturas que se pagan en el mes de noviembre de dicho año. Una primera factura de 23,75 pts. por el porte de aparatos de máquina cinematográfica. La segunda factura, la cantidad a pagar es muy elevada, 557 pts. por aparatos para máquina de cine. Igualmente en febrero de 1930 se existe una factura de 57,75 pts. dirigida a Paramont Films.

Como vemos en el Libro de Contabilidad, nos encontramos con muchas referencias a la proyección de películas en el Casino, por tanto, fue un lugar de referencia dentro del pueblo, para acercarse al mundo del Séptimo Arte. Pero no tenemos ninguna referencia a los títulos de las películas que se proyectaron y, por supuesto, el nombre de ninguno de los actores que intervinieron.

Por otro lado, durante mucho tiempo fueron películas mudas, hay que esperar a la sesión de junio de 1942, bajo la presidencia de D. Benjamín Salas, que solicita al Sr. Gobernador la autorización para celebrar una Junta General extraordinaria, con el objeto de tratar la reparación de la máquina de cine y la incorporación de los medios que permitan proyectar el cine sonoro.