ABRAHAM Y EL SUBCOMANDANTE MARCOS
La formación del famoso proyecto de Yolanda Díaz, que no debería ser tan famoso si pretende ir por lo discreto, lleva ya demasiado tiempo en gestación, con el calor que hace, y sin definir qué tipo de alternativa viable será, como para merecerse aún nuestra ilusión, ni la de nadie. Me recuerda al Subcomandante Marcos, y a Abraham, el profeta bíblico: el "ejército" zapatista, hizo uso de sus armas al principio, pero también se ganó el descrédito, pues ni consiguió ampliar su zona de influencia (cosa previsible), ni pudo mantenerlas más allá del detalle peliculero, pues algunos de sus posibles adherentes eran pacifistas; demasiado ridículo para alguien tan intelectual. Y Abraham, recibió la advertencia divina de arrojar fuego sobre los pecadores, ante lo cual pidió una demora para encontrar diez personas buenas; que luego pasarían a ser cinco, dos... Y va a ser lo que pase con Sumar (si Dios no lo remedia): que hay que saber prever cuánto deben durar los estados de expectación, y qué porcentaje de bondad y de fidelidad podrás recabar en tu entorno, si quieres formar algo sólido.
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