Hace unos días una mujer llamada Cathy Bernstein fue arrestada en Port Saint Lucie, Florida, por provocar un accidente y luego darse a la fuga. Anna Preston, la víctima del atropello, acabó en el hospital por dolores en la espalda, pero lo curioso es que poco después de que Preston informara a la policía del accidente, un operador del servicio de emergencias recibió una llamada curiosa. El sistema de notificación de choques de un Ford Focus avisaba del reciente impacto. Y ese Ford Focus chivato no era otro que el de Bursntein, por supuesto.
Coches chivatos, el futuro
Bernstein negó haber estado implicada en ningún accidente, pero al ser preguntada por qué el coche había mandado un aviso de impacto, Bernstein no supo dar una buena respuesta y acabó admitiendo que efectivamente había golpeado a un coche por detrás y luego se había ido a la fuga. El sistema, llamado 911 Assist, se integra en la mayoría de coches de Ford que se venden en Estados Unidos desde 2010.
Estos sistemas con conexión telefónica son una ayuda en caso de accidentes y emergencias y llevan tiempo implantándose en coches en todo el mundo -el Parlamento Europeo obligará a ello a partir de 2018- y plantean una alternativa muy interesante para que los servicios de emergencias puedan llegar al lugar del accidente rápidamente.
En este caso, no obstante, el servicio le hizo un flaco favor a la Sra. Bernstein: la policía acabó yendo a su casa y comprobó que su Focus tenía un impacto delantero y que incluso había saltado el airbarg del conductor. No era la primera vez que esta conductora había huido de otro accidente provocado por ella: poco después se descubrió que había habido otro caso parecido en el que había estado implicada hace tiempo.
1 comentario:
Hay machismo encubierto en la noticia ya que debería decir "persona", o mejor dicho, "persono", para evitar pensar que pudiera tratarse de una mujer.
Es normal que un hombre se dé a la fuga, todos conocemos alguno, pero una mujer nunca lo haría, tal como ha manifestado ese coche machista y mentiroso.
Además la culpa será del propio coche, del que lo diseñó o del marido de ella que no la tenía satisfecha... y tampoco es cierto que el coche declarase: “mujer tenía que ser”
Publicar un comentario