Hace días tuvimos la feliz idea de ir desde Santander a Madrid en tren. Sentimos un poco de vergüenza cuando comprobamos la realidad de los "AVE" que nos vendieron como promesas electorales. Tardamos más de una hora en llegar a Reinosa, más o menos lo que tardarían las máquinas de vapor de principios del siglo pasado.
Llegando a Madrid sufrimos el tradicional percance, que originó un retraso de más de hora y media, con lo que el viaje acabó durando 6 horas.
El dinero de nuestros impuestos, que habitualmente ha servido para pagar los autobuses que hacen los transbordos motivados por las múltiples averías, en esta ocasión han servido para que los pasajeros recibamos el importe total del viaje por el retraso sufrido, con lo que este nos salió gratis.
Desde aquí quiero darte las gracias por tu aportación y a los políticos por su "brillante" gestión, dirigida más a dividirnos y enfrentarnos, que a atender las necesidades reales de la población.
A. José Salas en Cartas al Director de El Diario Montañés.
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