En el parque de La Marga la flora está perfectamente atendida, los espacios verdes segados y los árboles luciendo su primaveral aspecto. Las mascotas suelen corretear y pasear con sus dueños e incluso se han colocado casetas-nido, para que los pajarillos establezcan en ellos su morada.
Los, cada vez más escasos, niños tienen su espacio con columpios y juegos apropiados a su edad.
En la bolera que está al fondo acuden jóvenes, de ambos sexos, que comparten espacio mientras se inician en el juego de los bolos.
Los únicos olvidados son los mayores, que han visto cómo hace meses se retiraron unos aparatos para hacer gimnasia, que estaban junto a la bolera, que les servían para mantenerse en forma haciendo ejercicio en ellos.
Es una lástima que mientras se cuidan la flora, la fauna, los niños, los jóvenes y el deporte, se olviden de nuestros mayores, que son los que en mayor cantidad acuden al parque. Espero que, especialmente por su salud, se repongan los aparatos retirados lo antes posible.
José Salas Pérez-Rasilla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario