La verdad que este era su nombre oficial, pero para los que tenemos cierta edad y que asistíamos a sus películas, nos referíamos a él como el “Cine los Frailes”. En cualquier caso, este fue un cine que se situaba en el colegio de las Escuelas de los Hermanos de La Salle.
En un primer momento, la proyección de películas, se llevaba a cabo en el pabellón que impartían los cursos de 4º y 5º. En concreto en el aula situada cerca de las vías del tren, donde impartía las clases el Hermano Anselmo. Posiblemente, antes fuera la clase de otro Hermano, pero cuando yo estudiaba en el colegio, él estaba al cargo de dicha aula.
La primera vez, que fui a ver una película a dicho aula, fue antes de entrar a estudiar en dicho colegio, acompañando a mi hermano Chuchi. Era un domingo hacia las 4 de la tarde; allí jugábamos en el patio con otros niños que esperaban la llegada del Hermano encargado de la sesión de cine. Cuando llegaba, abría la puerta, subíamos los tres peldaños de piedra y entrábamos en el aula. Allí nos encontrábamos con un aula convertida en sala de cine. La pequeña pantalla, estaba pegada a la pared del aula, que daba a la vía del tren. La máquina de proyección, se encontraba en una pequeña mesa auxiliar; cuando todo estaba preparado y todos sentados, se procedía a cerrar las cortinas, dejando toda la "sala" a obscuras e iniciando la proyección de la película. Como era una sola máquina de proyección, siempre que se había acabado el primer rollo, había que proceder a quitarlo y colocar otro para seguir viendo la película. Este era el momento del “descanso” en los que se abrían las cortinas y salíamos al patio para ir al urinario situado en la zona. Era el momento en que el fraile nos daba una barrita de regaliz duro, aquel que posteriormente, cuando me incorporé al centro, fue habitual verla circulando en las manos de los alumnos. No me acuerdo de quien estaba al frente de la cámara de proyección, si era un fraile o un seglar, pero daba igual, disfrutábamos.
Las películas siempre eran en blanco y negro. No recuerdo el nombre de las películas que allí proyectaron. Si me acuerdo, de una ambientada en la época medieval de Inglaterra, en la que había luchas de espadas, lanzas, arcos y flechas y tampoco faltaban los caballos. En todo caso siempre salíamos contentos e incluso con una nueva barra de regaliz. No sé, cuánto duró la proyección de películas en el aula del Hermano Anselmo, lo que sí es cierto, que posteriormente se trasladó a otra zona del Colegio.
Pero cine La Salle, o mejor dicho, el Salón de Actos del Colegio de La Salle, no sólo cumplió la función de dotar a los jóvenes de la época de la posibilidad de asistir a la proyección de películas a un precio asequible, eso si, como hemos dicho, siempre con el criterio de “películas aptas para todos los públicos”, y creo recordar que al principio solo para los alumnos del centro. Con el tiempo el Centro fue abriendo las puertas a otro tipo de actividades culturales como también hemos visto se producían en los otros cines que existieron en nuestro pueblo. Vamos a ver algunas de las actividades que se llevaron a cabo.
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