Esta artículo de Nacho Cavia me deja totalmente tranquilo. Mi opinión viene derivada de la manifestación de Fomento de que esta nueva incidencia no paralizará las obras en curso ni una posible apertura provisional del paso subterráneo. ¿Se inaugurará alguna vez? ¿Si por una remota casualidad se inaugura será todavía útil o se habrán acometido otras obras paralelas que harán que su tardía inauguración haga que ya no sea tan necesario? ¿Quien va a solucionar los múltiples inconvenientes creados a los vecinos? ¿Quien va a sufragar las innumerables pérdidas ocasionadas a los comerciantes de la zona, que ha visto mermadas sus ganancias, debido a unas obras que no se acaban nunca? ¿Cuanto más costará el túnel respecto a lo presupuestado?
Vemos que las obras del ya famoso túnel continuan su esperpéntico proceso y que estan preguntas nunca tendrán contestación.
Parece el cuento de nunca acabar. El equipo de gobierno (PSOE-PRC) de Los Corrales de Buelna desayunó ayer con un nuevo problema relacionado con las obras de eliminación del paso a nivel de la estación de Renfe. En esta ocasión es el retraso en la construcción de la rotonda que regulará el tráfico de las avenidas José María Quijano y Calvo Sotelo. La empresa adjudicataria de las obras ya ha iniciado el arco sur de esa rotonda, pero al comenzar el arco norte la empresa Trefilerías Quijano ha paralizado las obras. El motivo es la falta de acuerdo entre el Ayuntamiento y la empresa sobre las expropiaciones necesarias para acometer la rotonda. Hay acuerdo en cuanto al terreno afectado por el arco sur, pero no se ha firmado el acuerdo para trasladar la portería de entrada a la factoría corraliega, en lo que será arco norte de la rotonda. Rafael Fernando Pérez Tezanos, responsable de Obras en el Ayuntamiento, explicó que esa expropiación ha sido valorada por la empresa en 140.000 euros, que tendrán que salir de las arcas municipales. Aseguró que en la pasada legislatura no se alcanzó el necesario acuerdo con Trefilerías, «y ahora deberá solventar ese pago este equipo de gobierno». Señaló que Fomento aseguró ayer que esa cuestión no paralizará las obras en curso ni una posible apertura provisional del paso subterráneo. Y reconoció «no querer ni oír hablar de fechas para la apertura, ya que se han dado demasiadas y ninguna se ha cumplido». Aún fue más crítico con las posibles consecuencias del desarrollo de un proyecto, el de supresión del paso a nivel con un túnel subterráneo, «minimizado durante la pasada legislatura». «Dudas razonables»El edil afirmó tener «dudas razonables de que el resultado final de la obra vaya a dar el servicio para el que se proyectó». Terminó manifestando que «la obra se merece la crítica correspondiente, pero el que estemos todo el día lamentándonos no va a hacer que la ejecución se agilice».
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