La noticia aparecida en la prensa no nos ha pasado desapercibida ya que no es la primera vez que nos venden la construcción de la bolera como promesa electoral.
Toda la parafernalia de la colocación de la primera piedra, no sólo no nos sorprende, ni nos sabe a nueva, sino que nos la esperábamos.
Es indignante ver como los políticos creen que los ciudadanos somos tontos. Ya sabemos que en época de elecciones, todos los partidos -tanto los que están el poder como en la oposición- hacen múltiples y forzadas apariciones en los distintos medios de comunicación, para hacernos promesas de vital trascendencia para la ciudadanía. Estas promesas, muchas veces, no solamente son incumplidas, sino que en algunas ocasiones son nuevamente prometidas en legislaciones sucesivas.
Tras el fracaso de la famosa obra del paso subterráneo, están a la búsqueda de alguna otra que compense los despropósitos de aquella. En estas estábamos, cuando algún avezado político se la ha ocurrido resucitar la vieja promesa de la construcción del ya antiguo compromiso de la bolera cubierta. Tras esta feliz “resurrección”, han añadido que la empresa ha asegurado que intentará adelantar los plazos previstos para la ejecución del proyecto.
Un nuevo fracaso pasaría a los anales de la historia. Demos tiempo al tiempo.
Para poder ver la noticia en su totalidad, pulsar aquí.
1 comentario:
A unos pocos meses de las elecciones se les ocurre poner la primera piedra de una obra que se lleva vendiendo al menos 2 legislaturas. Despues de 8 años infructuosos ahora se pone la primera piedra. ¿De verdad hay presupuesto para esa obra? y otra pregunta ¿esa es la verdadera prioridad del pueblo de Corrales?
Yo que suelo leer los períodicos regionales, he visto reflejado en ellos que hay una necesidad de parques, una necesidad de zonas verdes, y alguna en concreto para poder desarrollar la propia fiesta Guerras Cántabras.
En el mismo artículo además se dice que los verdaderos impulsores de dicha obra se van a retirar de la política o los van a retirar, que eso nunca se sabe. ¿para que entonces ese empeño en acelerar esa obra y adelantar los plazos? deprisa y corriendo cuando en los 7 años anteriores se han dormido en los laureles.
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